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Carta de San Luis a la COP 30

Arquitectura y urbanismo en tiempos de emergencia: Por una Agenda Urbana Global con Justicia Climática

Vivimos un tiempo de emergencias y sabemos que los efectos de la acción humana sobre el planeta han alcanzado proporciones geológicas que marcan una desviación en la era del Antropoceno. El cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la desertización, la crisis hídrica, la degradación ambiental, la banalización del consumo, la depredación de los recursos naturales y el aumento de la pobreza y de la desigualdad social dibujan un escenario alarmante, especialmente en las ciudades, donde se calcula que habitará más del 68% de la población mundial en 2050 y donde se concentran 75% de las emisiones de gases de efecto invernadero.

Los niveles de control climático propuestos en el Acuerdo de París fueron superados en 2024. Las metas para 2025 no serán alcanzadas. En 2024 sólo se alcanzó el 16% de las metas de los objetivos de desarrollo sostenible. La desvalorización del conocimiento científico y el negacionismo de hechos comprobados comprometen el proceso civilizacional de la humanidad.

En tiempos de emergencia, ¿qué podemos hacer para recuperar el equilibrio planetario y asegurar nuestro futuro? 

Reunidos en San Luis de Maranhão, en el Seminario Internacional «Construyendo una Agenda Urbana Mundial para la COP 30«, promovido por el Instituto de Arquitectos del Brasil (IAB), en colaboración con la Unión Internacional de Arquitectos (UIA), la Federación Panamericana de Asociaciones de Arquitectos (FPAA) y el Consejo Internacional de Arquitectos de Lengua Portuguesa (CIALP), junto con profesionales, investigadores, gestores públicos, organizaciones sociales, comunidades tradicionales e instituciones educativas, presentamos esta carta como contribución a las decisiones que serán tomadas en la 30a Conferencia de la ONU sobre el Cambio Climático (COP 30), que se realizará en Belém, Pará, en noviembre de 2025.

Porqué arquitectura y urbanismo son instrumentos de transformación y apoyo a la vida colectiva, con impactos en el grado de emisiones y cambio climático, hacemos un llamado a la COP 30, a las organizaciones de arquitectos y a la comunidad internacional para la adopción de un enfoque integrado, vinculado a tres paradigmas que deben orientar las políticas urbanas y ambientales:

Un paradigma ambiental, que promueva el equilibrio entre el uso de los recursos naturales y su preservación, con acciones orientadas a la restauración ecosistémica, a la descarbonización y a la gestión responsable del territorio. La lógica del extractivismo extensivo y de la expansión urbana predatoria necesita ser superada por modelos circulares, compactos, resilientes y de bajo impacto, que contribuyan a economías solidarias y al cooperativismo.

Un paradigma cultural, que reconozca y valore los saberes locales, las culturas originarias, el derecho a la autodeterminación y los modos de vida tradicionales, que son fuentes de sostenibilidad y legado ancestral. La superación de la condición periférica de las naciones del Sur Global pasa por la valorización de la arquitectura, de la ciencia, del arte y de la identidad de cada pueblo.

Un paradigma civilizacional, que afirme el derecho a la ciudad y a la justicia socioambiental como principios fundantes de una urbanidad integrada y solidaria. Es fundamental superar la improvisación y el abandono que marcan la planificación urbana en los países en desarrollo, para garantizar ciudades accesibles, seguras, inclusivas, adaptadas a las emergencias climáticas y capaces de acoger con dignidad a sus habitantes.

Partiendo de estos principios, proponemos una agenda urbana global que articule los ejes temáticos de la COP 30, con las siguientes contribuciones:

1. 1. 1. 1. 1. Planificar y definir estrategias para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
            2. Establecer metas para ciudades con carbono neutral, basadas en las Contribuciones Determinadas Nacionalmente (NDCs).
            3. Incentivar materiales locales, renovables y de bajo impacto industrial; construir según Soluciones Basadas en la Naturaleza (SBNs); promover códigos de construcción con estándares renovables y soluciones inteligentes para energía, movilidad y vivienda.
            4. Apoyar iniciativas que promuevan la reutilización del patrimonio edificado como forma de optimizar los recursos ambientales de la ciudad.
            5. Conservar, ampliar y cualificar espacios libres, áreas verdes y permeables en los proyectos urbanos con implantación de parques inundables, sistemas de drenaje sostenible, reforestación y protección de cuerpos de agua.
            6. Fortalecer las políticas públicas relativas a la planificación del paisaje.
            7. Limitar la expansión de las ciudades sobre áreas naturales; incentivar la agricultura urbana y periurbana; incorporar criterios de sostenibilidad y eficiencia energética en los códigos de obras municipales; promover la conciencia ciudadana.
            8. Incluir comunidades vulnerables y pueblos tradicionales en la formulación de soluciones adaptativas.
            9. Proteger, con carácter de urgencia, a las poblaciones expuestas a riesgos ambientales, étnicos-raciales y de género.
            10. Priorizar edificios con materiales de baja emisión de carbono, eficiencia energética, reaprovechamiento de recursos y soluciones bioclimáticas. Planificar ciudades compactas, con uso mixto del suelo, movilidad activa y transporte público de bajo impacto.

En definitiva, Arquitectura y Urbanismo, practicados con responsabilidad y conciencia ambiental, son imprescindibles ante los desafíos climáticos. Son campos estratégicos en la formulación de políticas públicas comprometidas con la equidad, la calidad de vida, la preservación de la biodiversidad y la defensa de la democracia.

La circunstancia requiere inteligencia, sensibilidad, creatividad, solidaridad y cooperación para implementar, con carácter de urgencia, los modelos socioambientales exigidos por la situación de emergencia.

Que la Conferencia de las Partes organizada en el bioma Amazonas – región vital para la estabilidad climática global y esencial para los ciclos hidrológicos y de carbono del planeta – sea más que una alerta roja para el mundo. Es necesario iniciar el cambio: el momento en que los compromisos dejen de ser solo metas para transformarse en acciones concretas en los territorios de todo el mundo.

Esta Carta es un llamamiento de arquitectos, urbanistas, instituciones, investigadores y sociedad civil comprometidos con el futuro. Por ciudades verdes y resilientes. Por un planeta habitable. Por una Agenda Urbana Mundial que contemple justicia ambiental, cultural y civilizacional.

Instituto de Arquitectos del Brasil – IAB

Unión Internacional de Arquitectos – UIA

Federación Panamericana de Asociaciones de Arquitectos – FPAA

Consejo Internacional de Arquitectos de Lengua Portuguesa – CIALP

Seminario Internacional IAB

«Construyendo una Agenda Urbana Mundial para la COP 30»

São Luís, Maranhão, Brasil, 6 de junio de 2025.